Dirección de Innovación capacita a investigadores para resguardar la protección del conocimiento
Al alero del Convenio de Desempeño en Internacionalización de los Doctorados adscritos a BIOREN-UFRO y con el objetivo de avanzar en el tema de la protección del conocimiento que estos programas desarrollan, la Dirección de Innovación y Transferencia Tecnológica, brindó una capacitación en el uso del Cuaderno de Laboratorio; herramienta que actualmente ha adquirido un valor insospechado a nivel mundial para el registro diario de avances en una investigación.
“La implementación de esta actividad, de capacitar a los estudiantes de doctorados y también investigadores tiene que ver con los estándares internacionales de cómo llevar los registros de un estudio, de los resultados y metodologías, de manera que al momento de generar una estrategia de protección intelectual, podamos tener los registros de la propiedad de la información y de la protección del conocimiento”, explicó la Directora de innovación y Transferencia Tecnológica. Claudina Uribe.
Anteriormente, la Coordinadora de la Unidad de Transferencia Tecnológica, Fabiola Vásquez, señaló que el uso de estos cuadernos tiene dos vertientes: Para la Academia, dado que lo que no se registra se olvida, por lo tanto sirve para validar resultados y certifica la veracidad de la información, preliminar básica para propósitos académicos diversos; mientras que para la Protección del Conocimiento contiene la información necesaria para proteger las invenciones, es válido ante tribunales para probar quién es el creador intelectual de la investigación y permite visualizar el o los mejores experimentos para fortalecer, por ejemplo una patente en un tiempo establecido y específico.
La propiedad del saber
En este sentido, Uribe comentó que para la U. de La Frontera, en su calidad de institución pública, todo lo que sus investigadores y estudiantes generen le pertenece, por lo tanto la medida de llevar un cuaderno de laboratorio es la mejor prueba si llegara a surgir una litigación respecto de la propiedad intelectual de algún conocimiento. “Podemos constatar quienes participaron del proceso, cuáles fueron los pasos a seguir, cuál fue el rol de cada uno de los involucrados, y en la medida que se bien implementado, también sirve para ver hacia dónde va esa investigación”, agregó. Lo anterior porque muchas veces, un estudio empieza con un objetivo definido, pero en el transcurso del trabajo pueden surgir nuevos hallazgos que eventualmente pueden derivar en nuevas líneas de investigación u otros resultados adicionales.
“Es una herramienta útil y la idea es que lleguen a ser obligatorios en los laboratorios. Es la evidencia que avala nuestro quehacer científico. De momento, en el Laboratorio de de Biología Molecular Aplicada este cuaderno es de uso habitual y todos nuestros alumnos reciben uno y al final de cada semestre deben demostrar que ha sido utilizado y de manera correcta”, comentó la Dra. Leticia Barrientos.
“Es un material que ayuda a la toma de decisiones, e incorporar su uso como una práctica habitual es un avance porque muchas veces hay datos que los investigadores pasan por alto, pero al tenerlos registrados pueden ser significativos para el curso de una investigación”, dijo a su vez, el Dr. Gustavo Ciudad.
La actividad estuvo enmarcada dentro de las solicitudes de BIOREN-UFRO para la formación de los doctorantes respecto de cómo operan y funcionan las cadenas de valor y así estar actualizados de las exigencias de la ruta de la innovación que Chile necesita. “Como DITT contextualizamos a la audiencia en qué temas es relevante avanzar para los próximos años y cuáles son los focos de financiamiento de la línea nacional que promueve Corfo”, puntualizó Uribe.
Lorena Espinoza Arévalo
26/11/2014